BioKiri se puede considerar como sumidero de Co2 ya que cumple perfectamente su función para frenar la contaminación atmosférica y mejorar la calidad del aire, el único residuo que genera es una biomasa que se podrá usar como fertilizante para tu huerto o jardín. De este modo cerramos el circulo dando la posibilidad de crear un ecosistema que funciona en la Tierra por mas de 3.500 millones de Años.
Esta solución también esta siendo usada por la NASA para dar soporte vital a los astronautas en los viajes espaciales. Otro proyecto de la ESA basado en microalgas es MELiSSA, acrónimo inglés de Alternativa de Sistema de Soporte de Vida Micro-Ecológico (Micro-Ecological Life Support System Alternative), es un proyecto multidisciplinar concebido como un ecosistema basado en micro-organismos y en plantas superiores, diseñado como herramienta para comprender el comportamiento de los ecosistemas artificiales y para desarrollar la tecnología necesaria para futuros sistemas regenerativos de soporte de vida para las misiones espaciales tripuladas de larga duración – por ejemplo: para una base lunar o una misión a Marte.
La espirulina, el don eterno de la naturaleza.
Purificador de aire basado en la propiedad fotosintética de las microalgas, capaz de fijar co2 y las PM (10 y 2.5) de materiales pesados que proliferan en suspensión en el aire que respiramos. Desinfecta purifica y produce oxigeno nuevo. las microalgas verde-azules que produjeron el primer oxígeno de nuestro planeta hace 3.500 millones de años hoy pueden mejorar radicalmente el aire en nuestros hogares.
Optimizando las rutas de transporte se reducen los consumos de carburante y, por lo tanto, se reduce la generación de las emisiones de CO2 sin ninguna inversión inicial.
El cálculo de la huella de carbono es el primer paso para poder conocer las fuentes de emisiones de CO2 de ula organización. De esta manera, la huella de carbono permite identificar las medidas más eficientes a implementar para reducir las emisiones y consolidar la estrategia de acción frente al cambio climático.
Se puede ser "neutro en carbono" compensando la huella de carbono que no se ha logrado reducir realizando una aportación voluntaria de una cantidad económica a proyectos que consiguen absorber o reducir una cantidad de CO2 equivalente.
Al reducir la huella de carbono de la organización se reduce el impacto en el clima de la actividad. También se reducen los costes asociados al consumo de materias primas, de energía o de productos y, además, se genera un valor añadido en una sociedad cada vez más exigente en la acción frente al cambio climático.
Verificar la huella de carbono genera credibilidad al tener la garantía de un tercero independiente de que se ha calculado correctamente. Además, se genera un valor añadido para la marca en una sociedad cada vez más exigente en la acción frente al cambio climático.
El consumo de productos realizados con materiales reciclados tiene un menor impacto en el medio ambiente durante todo su ciclo de vida. Estos productos cumplen la misma o mejor función que un producto no reciclado y alcanzan las mismas o mejores cuotas de calidad y de satisfacción para el usuario. Generan menos emisiones de CO2 porque la mayoría de productos y materias primas procedentes de materiales reciclados necesitan en su obtención menos energía que los procedentes del medio natural.
Se puede extender la responsabilidad frente al cambio climático exigiendo a terceros en los procesos de contratación o compra determinados requerimientos vinculados a la reducción de emisiones de CO2.
Los productos desechables generalmente tienen una vida útil muy corta y suelen estar fabricados con materiales como el plástico o el poliestireno cuyos procesos de transformación son intensivos en el consumo de energía y, por tanto, en la generación de emisiones de CO2. En el caso de usos continuados la mejor opción es el uso de productos reutilizables por su menor impacto en el clima.
El cálculo de la huella de carbono es el primer paso para conocer el impacto de la actividad y reducir las emisiones de CO2. Solicitar a los proveedores su inventario de emisiones permite elegir entre ellos para reducir tu propia huella y transmitir la importancia de hacer frente al cambio climático a tu cadena de valor.
El impacto para el clima de la producción local es, como mínimo, 5 veces menor que la producción deslocalizada. Además de reducir la huella de carbono de los productos, favoreces la economía local (hipótesis basada en datos de alimentos. TCO2/año actualización alimentos kilométricos. Dato INE empresas alimentarias).