La ciudad de Málaga está haciendo grandes esfuerzos para aumentar la cantidad de zonas verdes. Sin embargo, la escasez de agua y la falta de espacio suponen un reto a la hora de mantener y expandir las zonas verdes actuales. Andalucía se encuentra, además, entre las regiones en Europa que más sufrirán los efectos del cambio climático, por lo que la adaptación de las ciudades es imperativa.
Las Soluciones Basadas en la Naturaleza (SBN) han sido identificadas por la UE como una de las herramientas esenciales para construir sociedades más sostenibles y resilientes, ya que generan beneficios económicos, sociales y medioambientales al tiempo que contribuyen a la mitigación del cambio climático y a la adaptación al mismo en las ciudades.
Pero, ¿cómo podemos integrar la naturaleza en densas áreas urbanas, donde el espacio es tan limitado, y hacerlo sin generar presión adicional sobre las escasas reservas de agua existentes?
El objetivo principal es demostrar una solución viable y escalable para añadir vegetación a la ciudad sin demandar espacio ni agua dulce, dando así respuesta a los dos principales retos en Málaga y muchas otras ciudades mediterráneas a la hora de mantener y expandir sus zonas verdes. Para ello, desarrollaremos un prototipo de un jardín vertical hidropónico que reutiliza el agua residual regenerada del edificio para su riego. Además, a través de esta solución contribuimos a mejorar la eficiencia energética de edificios y reducir el efecto isla de calor, dos grandes prioridades para la mejora de la calidad de vida en ciudades y su adaptación al clima.
En paralelo al desarrollo del prototipo, se desarrolló un plan de medición de impacto y un paquete de comunicación. El objetivo del plan es evaluar los resultados obtenidos para poder replicar y escalar el prototipo. El objetivo del paquete de comunicación es aumentar el conocimiento sobre los beneficios de estas soluciones.