Publicado por MAPFREel Miércoles, 13 Noviembre 2019

MAPFRE desarrolla planes específicos para mejorar la ecoeficiencia de sus inmuebles que permiten la optimización del uso de los recursos, minimizar la generación de los residuos y promover la participación y compromiso de los empleados.

MAPFRE desarrolla un triple Sistema Integrado Corporativo de Gestión Medioambiental, Energética y Huella de Carbono (SIGMAYE), con planes específicos para mejorar la ecoeficiencia de sus inmuebles, mediante la optimización del uso de los recursos (energía, agua, papel) y la minimización de residuos, promoviendo la participación y el compromiso de los empleados. Además, dispone de instalaciones energéticamente eficientes con sistemas de certificación ISO-50.001 y LEED.

El SIGMAYE se consolida con 3 planes estratégicos definidos hasta 2020: Plan de Expansión Medioambiental, Plan de Eficiencia energética y cambio climático, y Plan de Gestión y optimización de recursos. La implantación de estos planes estratégicos, ayudarán a cumplir el compromiso de MAPFRE de que todas sus entidades de con sede en España y Portugal sean neutras en 2021 y, el objetivo a 2030, de alcanzar la neutralidad en emisiones de CO2 del Grupo.

Algunas de las medidas implantadas hasta la fecha:

  • Compra verde y selección de proveedores con criterios medioambientales
  • Apagado de equipos en remoto
  • Campañas CoolBiz y WarmBiz
  • Optimización de recursos de impresión
  • Campañas de reciclaje.
  • Gestión sostenible de agua.
  • Economía circular y Proyecto "Residuo cero".

Destacamos algunos de los hitos conseguidos con la expansión del SYGMAYE:

  • El 33% de nuestros empleados, en el mundo, trabajan en instalaciones sujetas a controles medioambientales
  • Se ha conseguido reducir 94.478 metros cúbicos de consumo de agua
  • 154.297kWh de ahorro gracias a la Campaña CoolBiz
  • Se ha reducido el consumo de toner un 60% gracias al control en la gestión de la impresión.
  • Reducción de 25.154 toneladas de emisiones de CO2 con respecto a datos de 2013.

Con la implantación de estos planes estratégicos, generamos valor sostenible a nuestros accionistas; a nuestros empleados, que se benefician de una cultura medioambiental proactiva y responsable; y a la sociedad en general, por nuestra contribución a la investigación y difusión de conocimiento científico y tecnológico, a la gestión de recursos energéticos y a la lucha por reducir los efectos del cambio climático.