Publicado por FROOF

FROOF creará una plataforma cívico-comunitaria para compartir y promover soluciones tangibles para la sostenibilidad, la información y la salud de las personas. El foco estará en los hábitos de consumo, la descarbonización urbana y la agroecología de hogar.

Este proyecto busca educar sobre diferentes iniciativas que se pueden adoptar tanto a nivel personal como colectivamente para reducir las emisiones de CO2 en acciones del día a día: producir, comprar y consumir.

Por un lado, se quiere promover la producción propia y local de alimentos, que disminuirá la huella de carbono asociada al transporte además de promover la activación del ecosistema vecinal. Ello creará una red colaborativa de sistemas agroalimentarios basados en permacultura y sintropía. La agricultura de conservación, la agroecología, la agrosilvicultura y la gestión de residuos aumentan las reservas de carbono en la materia orgánica del suelo durante décadas.

Otro de los objetivos de este proyecto es desarrollar medidas comprobadas para reducir la cantidad de pérdidas y desperdicio alimentario mediante la sensibilización a las industrias, los comercios minoristas y los consumidores, y en encontrar usos beneficiosos para los alimentos que actualmente se desechan. La pérdida de alimentos no solo se traduce en una generación exagerada de GEI, sino que también implica desperdicio de agua, suelo, horas de trabajo, energía y otros recursos valiosos y limitados.

Además, la forma de consumir es un acto de activismo e impulsa una forma de ver la comida desde todas las perspectivas: social, económica, cultural, ecológica. Dentro de este ámbito, la alimentación a base de fermentados permite comprender que la pérdida de biodiversidad en nuestros estómagos está directamente relacionada con nuestra resiliencia frente a enfermedades y desequilibrios. Hoy más que nunca, estar sanos es la mejor herramienta contra la crisis climática.

Así, se busca visibilizar a la ciudad de Barcelona, Capital Mundial de la Alimentación Sostenible 2021, como ciudad referente e identificar y conectar diversas comunidades e iniciativas locales comprometidas con el medio ambiente.

Para conseguir el máximo impacto se utilizará la tecnología disponible y los medios de comunicación para enseñar al a ciudadanía a mitigar el cambio climático desde sus viviendas a través de la permacultura, reciclaje y fermentación. Se promoverá la producción propia de alimentos en el ecosistema vecinal, la introducción de alimentos fermentados como herramienta de la pérdida de biodiversidad y alimentos, promoviendo así la creación de empleo a nivel local.

La movilización de la sociedad de Barcelona impulsará mayores y mejores políticas públicas e iniciativas privadas en torno a la acción climática.